LITERARIO

carta de opinion 

 el problema del consumo de drogas en nuestros adolescentes, jóvenes y ahora niños cuyas edades fluctúan de 8 a 12 años, estudiantes de colegios y escuelas consumen drogas ya no fuera de los centros de estudio sino que ahora las ingresan.

Expendedores de drogas inducen a adolescentes, jóvenes y niños a “experimentar” las drogas, y para ganárselas hacen que expendan a sus compañeros. Otro grupo vulnerable inmerso en el consumo son las personas que se dedican al reciclaje (chamberos), andan con el saco para la recolección de plásticos, botellas, etcétera, y fundas pequeñas con un polvo blanco que lo ponen en cigarrillos y fuman; otros ponen el polvo blanco en sorbetes pequeños y lo inhalan. Igual procedimiento hacen estudiantes. Señores “eruditos” dieron tablas referenciales para la tenencia de drogas, y se aprobó esta barbaridad. La droga hace dependientes, y cuando se inician los procesos de recuperaciones (abstinencia) puede llegar a fallecer el adicto, como ya ha pasado, o dejarle secuelas irreparables a la salud; además que es un dolor de cabeza para los familiares, por no saber cómo poder controlar la adicción de sus seres amados. Deben existir a nivel país, no solo unidades de salud ambulatorias, sino también centros de internamiento, recuperación adictiva profesional, ayuda psicológica y reinserción a la sociedad; o sea, tratamiento integral. Hace 10, 15, 20 años, personas que consumían drogas no lo hacían a la luz pública, se escondían, respetaban a los mayores y a la autoridad; ahora nuestros jóvenes y niños consumen drogas delante de los adultos sin inmutarse, y a las autoridades no les temen. Los valores morales no existen ya.